Bosques pantanosos dominados por el aliso que colonizan de manera característica los bordes y las zonas colmatadas de manera incipiente de brazos muertos y remansos fluviales, ya sean naturales como los formados por bancos de arena o cantos rodados que bloquean la desembocadura de un arroyo o artificiales como en las colas de los embalses. Al recibir lixiviados de cuencas relativamente amplias, estos sistemas no acusan la oligotrofía intrínseca de la que depende la vegetación de humedales desarbolados como turberas y tremedales (@Q1, @Q2 y @Q4); pero el encharcamiento, al impedir la aireación del suelo y promover la desnitrificación, impone el predominio de plantas leñosas aerenquimatosas y fijadoras de nitrógeno como el propio aliso. En contraste con el rico contingente de hierbas nemorales de las ribereñas T121, el sotobosque de estas alisedas está dominado por un menor número de plantas especialistas, incluidos helófitos de alta talla y grandes graminoides amacolladas como Carex paniculata>/i>.